martes, 12 de febrero de 2013

No soy la responsable, pero si la culpable, por eso duele tanto.

Estoy
tan
cansada.

Estoy
tan
vacía.

Y siento
tanta 
pena.

Que sólo se me ocurre llorar.
Ya estoy otra vez jugando a esto:
siendo autocompasiva y,
como odio la autocompasión:
Odiándome.
Así, con mayúscula.

Echo ¡tanto! de menos.
Sensaciones.
A personas no.
Echo de menos aquellas sensaciones.
Echo de menos.
He hecho de menos. . .

Y no puedo.
No me dicen que no grite
porque saben que ya no tengo voz,
que sólo tengo voto.
Voto nulo.

Por favor,
rompe 
el recuerdo.

Por favor,
cierra 
las ventanas.

Y cuando 
vuelva
despierta-me.

2 comentarios:

morpheus dijo...

es muy triste pero muy hermoso

Darko Wiggin dijo...

Pues te señalo,
para que veas en mi dedo tu reflejo,
que se autoseñala, pero es consciente de ello,
muy consciente.