viernes, 18 de enero de 2013

La estupidez me golpea, se hace parte de mi. Y yo, no sé escapar.

No quiero,
te juro que no quiero, 
pero a estas alturas:
sólo sé llorar.


1 comentario:

Darko Wiggin dijo...

Tardamos tanto en aprender a desenvolvernos para luego enredarnos de nuevo, que la estupidez humana se hace patente demasiado a menudo...